domingo, 28 de julio de 2013

PAPA FRANCISCO – QUÉ SE ESCONDE DETRÁS DEL PAPA “BUENO”


Que el capitalismo se encuentra en una crisis política de carácter irreversible, ya no sorprende a nadie, y menos aún cuando dan pasos en ese sentido que aparecen como espectaculares y sorprendentes, y ni nos podemos imaginar los que van a aparecer.
El hecho más reciente así lo demuestra: el paso que acaba de dar la Iglesia católica con el nombramiento del Papa Francisco, y de la mano de él, el desparpajo, populismo y desenfado con que se expresa, que hasta se atrevió a plantear que los jóvenes hagan lío, en un contexto donde el planeta, producto de la lucha de los pueblos, se está prendiendo fuego, así parecen afirmarlo.
Pero esto no podía ser menor en el afán de intentar hacer una barricada para frenar o desviar el avance y ansias de los pueblos que cambiar esta vida indigna. Es por ello que tratan de tomar un atajo (llegaron tarde) y erigirse en apóstoles de una rebeldía que es producto, precisamente, del desprestigio que cada vez más se profundiza en las instituciones del sistema dominante, que también abarca a la Iglesia.
De ahí toda esta serie de respuestas de carácter populista que, contradictoriamente, benefician y alientan la lucha de los pueblos, y por ello es una crisis insalvable para la burguesía. Por ejemplo, cómo desdecirse del “hagan lío”; o dicho de otra manera, cómo lavo, ya no mis manos, sino la cara de la Iglesia si no les planteo lo básico: rebélense. Pero la gravedad de la crisis es que no pueden resolver nada en beneficio de los pueblos; por el contrario, porque el afán de la ganancia, la explotación del hombre y la concentración económica es inherente a su existencia, por lo tanto, graves problemas tienen: “hacé lío, rebelate, pero tengo que seguir chupándote la sangre”.
Vivimos en la era del capitalismo monopolista de Estado, y la Iglesia no puede estar por fuera de ello, para lo cual necesariamente también tienen que pegar un viraje en el timón. Por ello, para los sectores más concentrados del capital a nivel mundial, el nacimiento del nuevo Papa Francisco, como diría el proverbio popular, viene con un pan debajo del brazo para un sector hegemónico de la oligarquía financiera a nivel mundial y poder avanzar así, de la mano del Banco del Vaticano (principal accionista del Banco Ambrosiano), en el total control del Banco Ambrosiano, que al parecer es el bocado predilecto de otros sectores imperialistas como el Banco Mundial entre otros, que en el marco de la puja interimperialista, de la mano de la política, se dispone a entrar (y aparentemente con éxito) en los laberintos palaciegos del Vaticano que desde los comienzos de la guerra fría recibió de las potencias más importantes, como Estados Unidos, Alemania, Francia, Italia, multimillonarios aportes que ingresaron en la Iglesia para la lucha anticomunista.
De la mano de las contribuciones vino el lavado de dinero, la timba financiera, y un descontrol de una fabulosa masa de plusvalía, que dado el grado de poder planetario alcanzado por la oligarquía financiera, ya estaban en “manos equivocadas”.
La ingeniería se puso en marcha. Así parecen expresarlo claramente algunos hechos. Por ejemplo, Monseñor Ettohe Balestrero, Subsecretario para las relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado del Vaticano, presentó los resultados positivos en la prueba clave de transparencia financiera del Vaticano efectuada por MONEYVAL, comité de expertos del consejo de Europa para la evaluación de las medidas para “combatir” el lavado de dinero y la financiación del terrorismo. El mismísimo Monseñor afirmó: “Queremos construir un edificio que demuestre la voluntad de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano de ser un compañero fiable en la comunidad internacional”. Es bueno aclarar que MONEYVAL, años atrás le había bajado el pulgar con graves acusaciones al Banco del Vaticano por lavado de dinero.
El segundo paso de la ingeniería lo acaba de dar el Papa Francisco al crear una comisión compuesta por 8 miembros con poderes plenipotenciarios para reformar la estructura económica-administrativa del Vaticano con el objetivo, dicen “de la simplificación y la racionalización de los organismos existentes y una más cuidadosa administración de la Santa Sede, con el fin de elaborar soluciones estratégicas de mejoras necesarias para evitar el despendio de recursos económicos, promoviendo la transparencia en bienes y servicios, perfeccionar la administración del patrimonio mueble e inmueble, para operar cada vez con mayor prudencia en el sector financiero”. Está bueno aclarar que de los 8 miembros sólo 2 pertenecen a la curia, los otros 6 a países de Francia, Alemania, Italia y Singapur. Este último miembro llamado George Yeo, ex Ministro de Asuntos Exteriores de Singapur y Vicepresidente de Kerry Group Limited, estudió ingeniería en la Universidad de Cambridge con una beca presidencial, y en 1976 se graduó con la máxima calificación en dos disciplinas y se convirtió en Oficial de transmisiones de las Fuerzas Armadas de Singapur. Después de licenciarse en el Singapore Command and Staff College en 1979, fue destinado a las Fuerzas Aéreas de la República de Singapur. Obtuvo un máster en gestión de empresas (con la máxima distinción, la Baker Scholar) de la Harvard Business School en 1985. Fue nombrado Jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Aéreas (1985-1986) y Director de Operaciones Conjuntas y Planificación del Ministerio de Defensa (1986-1988), alcanzando el grado de General de Brigada.
Todo parece indicar que la política del doble discurso para poder llevar adelante las medidas económicas que se aplican en América Latina, lo está utilizando de receta las nuevas políticas de la Iglesia.

La unidad, centro del esfuerzo revolucionario



La experiencia que viene haciendo el pueblo argentino en su lucha de todos los días contra las miserias que ofrece el capitalismo como sistema, luchas que se extienden de punta a punta del país y por los más diversos motivos, ya que en la búsqueda de los negocios la oligarquía financiera se enceguece y no tiene límites geográficos. Los pueblos cercanos a la Cordillera de los Andes contra las mineras, comunidades enteras contra la extracción indiscriminada de petróleo y gas, provincias movilizadas por ser perjudicadas en las inmensas plantaciones de soja, conflictos todos los días por aumento de salarios y mejores condiciones de trabajo, cualquiera sea la rama o sector, productor o administrativo, privado o “estatal”. Así como ellos no conocen ni a su madre a la hora del negocio, la movilización les pone una traba a sus ambiciones y los condiciona permanentemente, haciéndolos retroceder en todos los rincones del planeta.
El capitalismo como sistema, ya dio demasiadas muestras de no querer ni poder resolver ninguna de las reales necesidades de los seres humanos. Éstos reaccionamos ya automáticamente con la lucha y la movilización a la hora de buscar respuestas concretas a la solución de esas necesidades.
Dentro de los centros industriales, la clase obrera está dando una batalla, que silenciada, les está moviendo los cimientos. Organizados para el reclamo concreto, de un sector, sección o planta; luchando todos los días contra los sindicatos que hacen de policías dentro de la fábrica que nos obligan a conspirar cotidianamente para avanzar en nuestra organización; fábricas donde ya se han ganado no solo cuerpos de delegados sino también comisiones internas; conflictos que han saltado el cerco de las cuatro paredes para trascender públicamente como las obreras y obreros de Kronberg & Shubert; asambleas extraordinarias en el sur del país, donde los obreros petroleros vienen llevando una lucha hace ya años; textiles de las provincias del norte del país que vienen luchando en contra de las condiciones esclavistas de producción; conflictos permanentes, con asambleas multitudinarias y organizaciones de base en los ingenios Ledesma y El Tabacal; y así una suma de experiencia que hace al conocimiento y la práctica en la lucha y la movilización. Ahora, es momento de que los revolucionarios, como parte de todo este fenómeno, como un actor más en este movimiento planteemos a estas vanguardias, que tienen un carácter de masas, la posibilidad material del cambio. La unidad pasa a ser una necesidad urgente, pero ya no solamente para conocernos las caras y transmitirnos experiencias, sino para ir consolidando un proyecto independiente de la clase obrera y de todo el pueblo en la lucha por el poder político. Por fuera de toda la pornografía electoral que nos intentan vender de todos los costados y discursos, más “revolucionarios” más progresistas, de derecha o de izquierda, todos y cada uno de ellos hechos para sostener este sistema. Lo revolucionario radica, entre tantas otras cosas, en tener un lenguaje directo al pueblo, a esas masas más arriba mencionadas, de que no hay salida posible dentro de los marcos capitalistas, que a todas las luchas, por más insignificantes que parezcan, hay que sembrarles la semillita del poder. Que esas organizaciones que hoy dentro de la fábrica están disputándole al enemigo un cuerpo de delegados o aquellas que ya lo ganaron, tengan en sus manos un proyecto que las haga ver más allá y además se sientan los verdaderos protagonistas, porque lo son. Que sepan que así como hoy luchamos y nos organizamos para el reclamo, así vamos a tener que organizarnos para llevar un país adelante, movilizados, autoconvocados, ejerciendo la democracia directa. Eso es revolucionario, eso es socialismo, eso es una política independiente de la clase obrera.

Una salida política revolucionaria de la clase obrera y el pueblo


Como era de esperar, la burguesía desató una gran parafernalia mediática de spot publicitarios electorales, con un sinnúmero de candidatos que, de izquierda a derecha, van por un objetivo en común: recuperar las desprestigiadas instituciones del Estado capitalista en la Argentina.
Mientras que en nuestro país, la clase obrera y el pueblo profundizan cada vez más la lucha de manera autoconvocada ejerciendo la democracia directa, la burguesía intenta, por los cuatro costados, crear expectativas en el parlamentarismo como salida a la enorme e irremediable crisis política y económica que padecemos los argentinos.
Y como ya es de público conocimiento, todo vale en los discursos en época electoral. La mentira, el engaño, las promesas, la caradurez, la falta de escrúpulos y cualquier tipo de artimaña política con el objetivo de sumar votos para “la causa”. Discursos empapados de una gran falsedad al mejor estilo de nuestra señora presidente, donde en ese arte es una gran especialista y permanentemente nos suele deleitar con sus lágrimas de cocodrilo y su capacidad de emocionarse repentinamente. Así como lo hizo frente al recitado de un niño kolla en un acto en Tecnópolis, donde demostró su capacidad de emocionarse repentinamente al mismo tiempo que ignoraba completamente los reclamos de todas las comunidades indígenas y las permanentes persecuciones y aberrantes asesinatos a integrantes de la comunidad Qom por dar solo un ejemplo.
Hartos del cinismo electoral y con un alto grado de descreimiento hacia todas las instituciones del Estado, la clase obrera y el pueblo de nuestro país llevan adelante, todos los días, permanentes luchas por sus conquistas y contra el atropello de las políticas del gobierno de los monopolios. Sin depender o esperar que las instituciones del Estado como ser el parlamento, la burocracia sindical, las fuerzas de seguridad, etc., vengan a resolverle los problemas; día a día se multiplican los conflictos en las fábricas, en los barrios, por mejor educación, por la defensa del medio ambiente y por todas las razones de injusticia y desigualdades que provoca el sistema capitalista.
Frente a esta situación la burguesía, tanto el oficialismo como la oposición, se disfraza con la máscara de la democracia parlamentaria. Todo un plan montado con el único objetivo de ocultar  las diferencias e intereses antagónicos entre las clases, y queriendo imponer la idea de que la solución está en la elección de los candidatos que mejor tengan la capacidad de administrar el Estado capitalista y los negocios de la oligarquía financiera en nuestro país.
Pero como venimos sosteniendo, que todos los planes de la burguesía se ven condicionados por la creciente lucha de las masas, hoy más que nunca es imprescindible seguir empujando hacia la unidad política de la clase obrera y el pueblo, para la constitución de una verdadera oposición revolucionaria independiente de todas las instituciones del Estado, que ponga en el escenario principal de la lucha de clases el cuestionamiento al poder de los monopolios y una salida política revolucionaria en manos de la clase obrera y el pueblo, para que seamos nosotros mismo quienes tomemos en nuestras manos el destino de nuestro futuro y la administración de las riquezas naturales de nuestra patria y todo los producido por nuestro propio esfuerzo, exclusivamente en función de nuestros propios intereses y no de los negocios de la oligarquía financiera.

Por qué los revolucionarios no debemos participar de las próximas elecciones.


En primer término ésta es una decisión eminentemente política. ¿Por qué? Porque nos encontramos en un momento de inflexión en el proceso revolucionario.
Hay momentos de la historia, y éste es uno de ellos, en donde una política de principios es una política táctica, muy lejos de cualquier “principismo”.
Las elecciones que se nos presentan en breve se realizarán en un marco de crisis política de toda la burguesía y sus instituciones. Sus propagandas en los medios expresan verdaderamente la decadencia en que están inmersos agraviando la inteligencia de todo un pueblo.
Se siente como nunca antes de este lado de la barricada la ausencia de una alternativa al parlamentarismo burgués. Aún los esfuerzos por dotar a nuestro pueblo de una salida política revolucionaria son extremadamente débiles y por lo tanto ese asqueo generalizado a la pornografía electoral no se traduce en una acumulación de fuerzas políticas contra el sistema corrupto y necesariamente dominado por un grupo de monopolios que necesitan de este juego parlamentarista para sostener instituciones que gobiernen y decidan a favor de ellos con el disfraz de demócratas.
En este marco, sintetizado, aparecen situaciones peculiares, que tienen mucho que ver con la historia de la luchas de clases  pero que se presentan en la actualidad de muy diferente forma. ¿Qué queremos decir con diferente? Es que en la actual lucha de clases coexisten, de hecho, dos democracias, una que está condenada por la historia y por el presente: la que no puede resolver los problemas más básicos de la población explotada y oprimida que es el parlamentarismo sostenido por la burguesía, y por el otro lado,  la Democracia Directa y la metodología autoconvocada que es adoptada por millones de compatriotas en varias escenas históricas de enfrentamientos.
Esta Democracia Directa es lo nuevo, lo que está naciendo, lo que se está desarrollando y es lo que está pujando por sostenerse en un marco de violencia sistemático sostenido por el sistema contra esas expresiones abiertas o intuitivas que sienten las masas en sus corazones.
Son dos democracias que coexisten, enfrentadas porque enfrentadas son las clases en pugna. Esta peculiaridad de la época, la que los revolucionarios caracterizamos como diferente de otros momentos de nuestra historia, obliga a ser muy claros frente a las masas que están luchando, que están dando los pasos necesarios para irrumpir con mayor fuerza en cada enfrentamiento que se sucede.
Lo dominante es el parlamentarismo burgués porque la dominación de clase es ejercida a través del Estado que les pertenece. Pero cuando hablamos de coexistencia con la Democracia Directa es porque pensamos que ya se ha expresado el verdugo que ajusticiará a la dominación burguesa basada en la ganancia, generada en los negocios contra el pueblo y contra la naturaleza de la que es parte.
Es un momento de tomar bien fuerte el timón, sostenerlo en una tormenta pasajera y decadente de intentos populistas, reformistas, “progresistas” que se maquillan con el solo fin de sostener un sistema electoral que garantice las instituciones que sometan a nuestro pueblo a tanto dolor y oprobio. 
Es en este momento de la historia en donde los revolucionarios tenemos que multiplicar las luchas por las conquistas políticas en cada lugar concreto, desplegando lo nuevo que está en la sociedad que es la Democracia Directa que cuestiona a los partidos políticos parlamentaristas de cualquier color, a la justicia, a las instituciones represivas,  y que está marchando aceleradamente a constituirse en la opción revolucionaria de cambio sustancial en la vida de todos los argentinos.
Como nunca antes, pasadas las próximas elecciones los problemas del pueblo se agravarán augurando una nueva calidad del proceso en marcha.

jueves, 25 de julio de 2013

Los disfraces se caen a pedazos…

El gobierno de los monopolios, a través de toda su actividad discursiva, encuentra cada vez mayores escollos para tratar de cambiarnos “la bocha” y para tratar de presentar sus “logros” en defensa de los trabajadores y el pueblo…
Desde el nombramiento de Milani, nuevo jefe del Ejército, hasta los negocios abiertos para Chevron, pasando por los suculentos subsidios que se continúan entregando a los monopolios y el manotazo de esta nueva farsa electoral (todos temas desarrollados ampliamente en esta misma página); muestran decisiones políticas que dejan al descubierto el verdadero carácter de este gobierno y cuáles han sido y son los móviles de sus planes. TODO, ajeno a los trabajadores y el pueblo.
Un pueblo que sabe de sobra que todo lo que ha conseguido ha sido conquistado por la lucha, metiéndoles el aliento en la nuca y no dejándoles pasar una.
Cada día que pasa, cada medida que intentan tomar o que toman, lo único que hace es hacer crecer la desconfianza en los funcionarios, en las instituciones y en las empresas monopólicas que este gobierno representa.
Por eso, a nadie puede sorprender que la lucha de clases continúe agudizándose. Cada vez que la burguesía monopolista intenta –por decirlo de alguna manera- retomar la iniciativa e ir en contra de las conquistas obreras y populares, sus negocios -basados en la superexplotación y en la opresión- quedan al desnudo y cuando avanza la lucha, terminan siendo desactivados. El enfrentamiento a sus políticas no sólo no se detiene sino que se hace cada vez más incontenible para la burguesía: dos proyectos antagónicos chocan de forma permanente.
Ese es el brete en el que están encerrados, lo que les embarra la cancha y posiciona en inmejorables condiciones las perspectivas de nuestra lucha como clase y como pueblo.
Esto agudiza el principal problema de la burguesía: sus crisis políticas condicionadas cada vez más desde abajo, apretándolos en donde les duele.
Desde esa experiencia, desde esas luchas, es desde donde debemos encontrar los caminos de unidad en todos los niveles, establecer nuestras organizaciones, de las más variadas, institucionalizarlas entre la mayoría de los trabajadores, utilizar todas las herramientas y hacer pesar nuestras fuerzas, y nuestra independencia política como clase y como pueblo.
La democracia directa, el estado asambleario, la metodología de la autoconvocatoria, atraviesan de punta a punta este notable proceso. La preparación de las fuerzas organizadas están en marcha y nuestra dignidad no tiene techo.
En el marco de todas estas batallas, van apareciendo nuevas vanguardias, miles de hombres y mujeres que se van fogueando en la lucha, que van conociendo en los hechos el poder de sus propias fuerzas, que van probando los caminos de unidad, que están experimentando en la mejor escuela, que es la movilización y la lucha.
En ese camino, en ese despertar de centenares de miles, las ideas revolucionarias se comienzan a desplegarse notablemente y todo comienza a tener otra dimensión.
A partir de ahora, nada será como era entonces. La burguesía lo sabe y le teme.
Desde el campo revolucionario, deberemos saber aprovechar este momento.

Energía revolucionaria para cambiar la historia

Invierno tras invierno la misma situación y verano tras verano también, las dos estaciones climáticas mas opuestas de la naturaleza aunadas por la misma cuestión: Los cortes de energía. Siempre repitiendo y argumentando falacias para justificar las políticas de la oligarquía, el gobierno ya no puede disimular su bajeza, que mantiene en un nivel cada vez más alto su conducta lacaya disfrazada de progresismo.  
Las justificaciones del verano pasado fueron que los cortes se debían al exceso de consumo de los aires acondicionados y ventiladores. En el invierno pasado y en el anterior, y así hasta varios años atrás, los problemas con los equipos de las centrales eléctricas eran el argumento más a mano; hasta se llegó a argumentar que se sabotearon las torres de alta tensión y otras tantas sartas de mentiras como esa.
Ahora bien, según el ministro De Vido, los cortes actuales se deben a que gracias a esta política nacional y popular creció la actividad industrial y que gracias a la compra de nuevos artefactos para calefaccionar, más modernos y adecuados a esta era de modernidad se saturó la capacidad de generación eléctrica  provocando el colapso del sistema eléctrico y como consecuencia de ello se da lugar a los cortes de energía. ¡¡Qué bien¡¡¡ dice el ministro, todo esto quiere decir que el país está creciendo que no hay luz porque hay más consumo,¡¡¡ y se anima a lanzar una cifra ¡¡22.700 MW llegó a tener el pico de estos últimos días, ¡¡qué grandioso¡¡¡ y exclama su mentira atroz a los cuatro vientos identificando todas las formas de consumo eléctrico y acentuando que el uso popular es el que provoca las carencias, pretendiendo así disimular la realidad, en un indisimulado acto electoral y con este argumento agrega otra falacia más a la historia de las falacias del mundo capitalista. 
Pero dejemos en claro algo, si la energía se corta por exceso de consumo significa, ni más ni menos, que la capacidad de generación energética es escasa. Pero eso no es todo. ¿Qué significa exceso de consumo? Quiere decir acaso que nuestro pueblo despilfarra energía eléctrica en invierno, con frío y clima lluvioso, sin calefacción a gas, dependiendo enteramente de la electricidad? ¿Cómo puede haber exceso de consumo si a causa de la precariedad de los tendidos y a las explosiones de los transformadores en grandes zonas del conurbano falta la energía casi permanentemente?
La falta de energía va rotando de una zona a otra y hasta se hace crónica en innumerables barriadas populares del gran Buenos Aires. Del mismo modo que se está haciendo crónico en la capital federal y se hace crónico en el tiempo - como decíamos- año tras año. ¿Exceso de consumo quiere decir acaso que nuestro pueblo tiene asignado un límite de consumo eléctrico respecto de la capacidad de generación eléctrica, rango  que una vez superado provoca los cortes?   Esto es ni más ni menos que echarle la culpa a nuestro pueblo por los cortes de luz y por otro lado reconocer  -aunque su intención no haya sido esa- que efectivamente es así.
La oligarquía financiera con el Estado y el gobierno a su servicio ha modificado, en beneficio propio, la generación eléctrica. Por un lado, limitando el consumo popular, por otro, aumentando las tarifas a niveles excesivos, por otro, importando y exportando energía por todo el continente, es decir apropiándose de los recursos ya creados usufructuados en función de sus intereses de clase.  Pero esas limitaciones al consumo, el exceso de precios, y la importación de energía no tienen otro destino que sostener la producción y reproducción del capital, es decir, están entramados en consonancia con el sistema de explotación del sistema capitalista. No están de ninguna manera aplicados a las necesidades sociales. 
Con la energía eléctrica pasa lo mismo que con cualquier otra mercancía, la determinación está puesta en función de las necesidades del capital y se distribuye según sus conveniencias económicas y políticas.
Hace más de treinta años que la capacidad de generación eléctrica en nuestro país está entre 26.000 y 28.000 mgw. Sin embargo esta cifra, que frente a las necesidades sociales es escasa, se adecua a la distribución que la oligarquía predispone. De allí que año tras año las carencias de energía eléctrica se hagan más y más notables para el pueblo frente a la demanda de los niveles de producción que exige el capital, que absorbe energía a costa de las necesidades sociales.
Frente a las recomendaciones de los medios de comunicación de moderar el consumo al pueblo se expresa que la energía es de clase y que está en función del capital. Este tremendo freno al desarrollo de la dignidad humana, esta decidida limitación al consumo hogareño es lo que la oligarquía pretende para el pueblo pero al mismo tiempo demanda más y más energía para asegurarse el despilfarro de que es capaz. 
La necesidad de cambiar este estado de cosas es más que visible, es una demanda social cada vez más definida en las luchas y acciones, en la conquista de una vida digna. Ni el más “progresista” gobierno al servicio de la oligarquía puede ya engañarnos con mentiras, es hora de aunar las energías revolucionarias de la clase obrera y el pueblo en un solo torrente de acción para iluminar con la revolución socialista la vida digna por la que luchamos.  

El circo electoral y la realidad del pueblo

Nuevamente las campañas electorales nos confirman una realidad: la inmensa cantidad de listas y candidatos es inversamente proporcional a la presentación de ideas que, fuera de toda coyuntura electoral (donde lo único que se busca es lograr un voto más o menos), señalen algún camino cierto de superación de los acuciantes problemas que vivimos como sociedad.
Todo anda mal, aquí y en el mundo, pero se hace como si eso que anda mal fuera una fatídica predestinación a la que nos debemos acostumbrar y, por lo tanto, no debería ser esperable encontrar propuestas para arreglar las cosas. En esta lógica, los procesos electorales calzan como un guante ya que a nadie se le “cae una idea” y el patetismo de las campañas reflejan, precisamente, la falta de contenido de una instancia en la que ya ni siquiera se hacen falsas promesas como era común en otras épocas.
La burguesía dominante ha trabajado muy bien en dos aspectos fundamentales para garantizar su dominación de clase. Uno, es el presentar el capitalismo como el único sistema de organización social posible, a pesar de los desastres humanos y ambientales que está ocasionando en el planeta y de la comprobada ineficacia para cubrir aspiraciones mínimas de dignidad humana. La otra, lo que sería su correlato político, es la presentación de la democracia burguesa, el parlamentarismo, que no es más que la delegación de la representación política y la administración de la cosa pública en manos de los “profesionales” de la política a los que debemos “elegir” cada tantos años y así depositar en ellos el manejo de nuestras vidas presentes y futuras.
Mientras tanto la sociedad, dentro del propio proceso capitalista, experimenta una creciente e inédita socialización de la producción en la que millones de seres humanos participan y garantizan, conciente e inconcientemente, de los procesos productivos cuyos frutos se apropia la oligarquía financiera, cada vez más concentrada. Bien podríamos decir que la sociedad se pone en marcha todos los días gracias a los millones y millones que garantizan ese funcionamiento en el marco del alto grado de organización social alcanzado del que la burguesía participa como clase parasitaria que sólo busca garantizar su ganancia y su dominación.
Entonces nos preguntamos: Si cada día nuestro aporte y sacrificio son determinantes para contribuir a la organización social alcanzada, ¿por qué debemos depositar las decisiones políticas, sociales, económicas en una capa cada vez más fina de la burguesía dominante, minoritaria en toda la línea, para que lleve adelante el manejo de la sociedad?; concebir las formas burguesas de representación política, ¿no es acaso permitir que la burguesía “represente” nuestros intereses como clase y como pueblo, totalmente antagónicos a los suyos?
La participación en el “juego electoral” es la trampa en la que la burguesía dominante quiere que caigamos, pues desde allí no sólo le hacemos el juego a su forma de hacer la política sino también nos alejamos del cuestionamiento irreconciliable a su dominación.
Que las elecciones no desvíen un ápice, de la construcción de la unidad por abajo, que dé cauce político revolucionario a las miles de luchas cotidianas de nuestra clase y nuestro pueblo.

Unidad necesaria para una nueva Argentina

Imperialismo es capitalismo monopolista de Estado. Imperialismo es el poder ejercido por la gran burguesía por sobre el resto de la sociedad. Imperialismo es capitalismo en descomposición, es capitalismo decrépito, capitalismo en su fase histórica final.
Toda la clase burguesa sabe que los grandes capitales son los que marcan la cancha, imponen sus negocios y someten al resto de su propia clase. Pero saben también que es la única forma que tienen de hacer sobrevivir el propio sistema basado en la expropiación de todo el pueblo y, aunque protesten por la “injusta” situación frente al gran capital, callan frente a los padecimientos populares.
Por su parte, la clase obrera y el pueblo asisten a una situación inédita en la historia. Sus intereses, sus necesidades, sus aspiraciones, en suma, sus vidas no tienen ninguna posibilidad en este sistema. Y esto no quiere decir que antes la tenían, sino simplemente que los plazos de sobrevida se han acortado.
Advierte, comprueba en la práctica cotidiana, que si la propia burguesía ha perdido su capacidad de competencia contra el capital más concentrado y que, para sobrevivir, necesita “asociarse” a éste y al Estado monopolista que es su herramienta de dominación de toda la sociedad, con más razón las capas populares carentes de toda propiedad de medios, tienen cerradas todas la puertas de su desarrollo.
No hay posibilidad de desarrollo de ningún tipo en esta sociedad y las hendijas a través de las que algún sector pudiera colarse para lograr una sobrevida han sido brutalmente cerradas por las leyes de la concentración monopolista.
La movilización y la lucha social, constituyen las armas cotidianas de la vida pues ya no existe margen de ningún tipo para obtener algún beneficio más que arrancarlo de las garras del gran capital.
Pero, ¿hasta cuándo debemos luchar…?
Así como las hendijas del sistema se fueron cerrando, el oxígeno se hace más enrarecido y sólo la apertura de puertas nos devuelve el aire para respirar.
Es por eso que ha llegado el momento impostergable de encontrar la salida franca y amplia por donde transiten las necesidades y aspiraciones del proletariado y el pueblo trabajador.
Es por eso que es necesaria la unidad política de todos los sectores populares agobiados por esta realidad asfixiante.
No hay ninguna posibilidad de encontrar esa salida, el camino hacia esa realización, a través de las instituciones del sistema y de sus propios mecanismos, pues estos están diseñados para el cierre y el ahogamiento de esas alternativas, en lo posible, antes de que dejen de ser embriones.
La unidad política es el encuentro entre los intereses de clase del proletariado, los demás trabajadores y pueblo oprimido en el proyecto de cambiar las leyes del sistema basado en la opresión y expropiación de los bienes producidos y los recursos naturales de todo el país para enriquecimiento de un pequeño grupo privilegiado. Cambiar esas leyes es romper con este sistema basado en el cerramiento de puertas hacia el desarrollo y suplantarlo por un sistema político, económico y social basado en la apertura de todas las potencialidades humanas. El socialismo es precisamente, ese sistema que nos permitirá desarrollar desde cada fábrica, barrio, escuela y lugar de vida y trabajo, con sus nuevas instituciones creadas en el curso de la movilización y la lucha, ese norte que hoy intuimos y que mañana iremos pergeñando.
Esa unidad política y orgánica desde donde se discuta, planifique y ejecute la acción sobre la lucha y la movilización cotidianas, es la que nos permitirá lograr una vida digna de ser vivida por los argentinos que la merecemos y esa nueva Argentina no tiene lugar para los actuales responsables de esta situación: la burguesía imperialista.

Santa cruz - Paro y toma del yacimiento Cerro Negro de la Goldcorp

La lucha intermonopolista recrudece ante las medidas tomadas a favor de Chevron. Se ha generado una ofensiva de todas las multinacionales extractivas en busca  de igualdad en la ventajas que recibe Chevron mientras los medios nacionales sólo se hacen eco de ladecisión de la canadiense Goldcorp de “suspender la campaña de exploración iniciada hace poco más de dos meses, por falta de financiamiento (por la baja internacional del precio de los metales) y la inconveniencia de aumentar las reservas ante la obligación de pagar un impuesto adicional por ellas, en virtud del gravamen recientemente sancionado por la Legislatura provincial”.
En ese marco, los 500 trabajadores del yacimiento Cerro Negro, que es operado por la minera Goldcorp, ubicado a 70 kilómetros al sudeste de Perito Moreno lanzaron, el último miércoles, un paro por tiempo indeterminado en reclamo por 80 despidos y denuncian que la compañía pretende llevar adelante un plan de despidos masivos que afectaría a cientos de trabajadores mineros y sus familias.
Desde el inicio de la medida de fuerza, los trabajadores tomaron el control del yacimiento y procedieron a desalojar todo el personal jerárquico de la compañía.
Desde la boca de la mina, que es controlada por los trabajadores, declaran “no van a mover una sola piedra hasta que no haya solución a nuestro pedidos” “no permitiremos que nuestro trabajo sea la variable de ajuste”, “no vamos a permitir que un solo compañero se quede sin trabajo”. La presente medida de fuerzas se enmarca en una larga lucha de los trabajadores por salarios, condiciones de vida, seguridad e higiene.
Durante el presente mes los trabajadores camioneros realizaron  cortes y mantuvieron bloqueada la empresa durante 4 días  para lograr el reencuadramiento del personal que maneja los camiones dentro del yacimiento.
El pretendido ajuste no significa que Goldcorp renunciará, a la “gallina de los huevos de oro”, nunca mejor dicho, que es tener vía libre para explotar intensivamente los recursos naturales de la provincia. La empresa no paga por lo que se lleva, deja todo contaminado, no remedia el ambiente y se llevará, a partir de los próximos meses, gracias a una nueva planta de procesamiento, 15 millones de dólares por día, sólo de oro, sin contar la plata y otros minerales secundarios.
Las cartas están echadas, pero el paño no es el mismo que el de la década del 90. La clase obrera no acepta extorsiones ni amenazas, ni está dispuesta a retroceder ni un tranco de pulga en sus derechos y su dignidad.

CHEVRÓN: CRÓNICA DE UN NEGOCIADO YA ANUNCIADO

Cuando el gobierno kirchnerista anunciaba con bombos y platillos la mentada nacionalización de YPF, no era nada más ni nada menos, para nuestro partido, que la crónica de un gran negociado internacional anunciado. Así lo denunciamos en nuestra página y materiales, y toda la súper estructura política y periodística del país se hicieron los distraídos.
Ahora que se avecinan las elecciones burguesas y que se hizo “oficial” la firma del tratado con CHEVRÓN, todos los políticos burgueses y los medios de comunicación masivos “opositores” a todas estas políticas saltan escandalizados a vociferar algo que ya hace tiempo era de público conocimiento, pero de lo cual a ningún sector de la burguesía monopolista les convenía hacer olas, pues en la lucha intermonopólica todos estaban a la disputa de la porción del shale gas y shale gasoil en la Argentina.
A continuación transcribimos una nota publicada en esta página en marzo del 2012, donde ya lo anticipábamos, como también una serie de títulos que pueden encontrarse en esta misma página relacionados con el petróleo en Argentina.
QUÉ ESCONDE EL GOBIERNO DETRÁS DE LA “LUCHA” CONTRA REPSOL-YPF (7/3/2012)
“El embate del gobierno nacional contra Repsol, controlante de YPF, es vendido como parte de la “lucha contra las corporaciones”, pero en realidad, esconde otras motivaciones mucho menos heoicas de las que se presentan.
Durante diciembre de 2010, se anunció el “descubrimiento” de importantes reservas de shale oil y shale gas en el sur de nuestro país. El shale es la denominación que se le da al petróleo y al gas que se encuentran entre la roca de la corteza terrestre, por el cual se utilizan métodos de extracción denominados “fractura hidráulica” que consisten en la inyección de grandes cantidades de agua más arenas y aditivos químicos, como el tolueno y el benceno, altamente contaminantes y cancerígenos.
El descubrimiento al que hacemos referencia más arriba, significó que nuestro país aumentó de un plumazo cinco veces las reservas de gas. El shale gas, o gas esquisto, es un combustible que se viene utilizando en el hemisferio norte, sobre todo en EEUU y Canadá, en reemplazo del gas convencional, al punto que la producción de esquisto saltó de 11.037 millones de metros cúbicos en 2000 a 135.840 millones en 2010. En caso de seguir a este ritmo la expansión, en 2035 llegará a cubrir 45 por ciento de la demanda de gas general, según la EIA, agencia de energía de los Estados Unidos.
Un estudio de la misma agencia, publicado en abril de 2011, encontró prácticamente el mismo volumen (187,4 billones de metros cúbicos) de gas esquisto en apenas 32 países, y China, Estados Unidos, Argentina, México, Sudáfrica y Australia (en ese orden) concentran casi el 80% de esas reservas.
Las reservas en nuestro país están en yacimientos bajo dominio de Repsol, sobre todo en la provincia de Neuquén, y están calculadas para alcanzar a 300 años de consumo actual, como para que veamos de qué cifras y de qué negocios estamos hablando.
A principios de este año, se realizó en Buenos Aires el congreso “Shale Gas & Tight Oil 2012″, del que participaron empresas como Exxon Mobil, Total y Statoil, y bancos como el Citi y del Bank of America. Se advierte que entre los participantes no se encontraba el principal actor y poseedor de los yacimientos, que es Repsol. “Sorpresivamente”, luego de la operación de tiroides presidencial, la presidenta “eligió” como blanco a la empresa de origen español, coincidentemente con los anuncios de una reestatización y otras yerbas.
El impresionante negocio en danza, ha recrudecido la lucha intermonopolista mundial por el control de estos recursos, en una pelea abierta por los mismos y a la que se presenta como la “lucha contra las corporaciones”. Mejor sería, lucha entre corporaciones, en las que el gobierno nacional es arte y parte favoreciendo, según el caso, los intereses de uno u otro sector monopolista.
No existen batallas justas pues no es justo el fin que se persigue, sólo es una batalla por ver qué sector de la oligarquía financiera mundial se queda con esos recursos. Este es el funcionamiento del capitalismo monopolista de Estado en toda su dimensión.”
Se puede también leer: UN NUEVO VERSO: LA ESTATIZACIÓN DE ALGUNAS EMPRESAS (25/3/2012)
http://prtarg.com.ar/2012/03/25/un-nuevo-verso-la-estatizacion-de-algunas-empresas/
HUMO NACIONAL Y POPULAR: VERDADERO NEGOCIO MONOPOLISTA (29/12/2012)
http://prtarg.com.ar/2012/12/29/ypf-humo-nacional-y-popular-verdadero-negocio-monopolista-2/
FRACKING=MUERTE (23/2/2013)
http://prtarg.com.ar/2013/02/23/fracking-muerte-2/
EL ESTADO NO ES ÁRBITRO NI RESGUARDA EL INTERÉS NACIONAL: UN GRAN NEGOCIO PARA EL ENVENENAMIENTO (27/3/2013)
http://prtarg.com.ar/2013/03/27/el-estado-no-es-arbitro-ni-resguarda-el-interes-nacional-un-gran-negocio-para-envenenamiento-del-mundo/

domingo, 21 de julio de 2013

Una misma clase, un mismo interés, un mismo enemigo

Al igual que en las diferentes regiones del mundo, donde las huelgas obreras se multiplican, haciéndole frente al intento de avasallamiento de las políticas inhumanas de la burguesía mundial, en América Latina, la clase obrera también se va encausando en el mismo torrente de luchas, donde en nuestro país, por dar un ejemplo y por más que se quiera ocultar, es una muestra clara de esta realidad.
En el día de ayer miles de mineros colombianos de 80 municipios y 18 regiones, mantuvieron bloqueadas las principales rutas de ese país, en contra de las políticas de gobierno que atentan contra las fuentes laborales de los trabajadores. En el marco de la jornada de paro y movilización de ayer, los mineros tuvieron que enfrentar fuertemente la represión que desató la policía en diferentes puntos del país. Los enfrentamientos más fuertes se produjeron en el corregimiento de Irra, donde fueron heridas una decena de personas y, al menos, 40 niños permanecen hospitalizados por el efecto de los gases.  
Este hecho se sumó a la huelga en la región norteña del Catatumbo colombiano donde continúa paralizada desde hace cinco semanas tras las protestas de más de 16.000 campesinos que ratificaron su decisión de no moverse de las rutas hasta que el Estado dé soluciones a sus exigencias, entre ellas la creación de una Zona de Reserva, la aplicación de un plan para la sustitución gradual de los cultivos y subsidios para mitigar la crisis alimentaria.
La situación en Colombia se suma a la huelga general en Brasil de la semana pasada, donde según fuentes oficiales, no se había registrado un paro de esas características desde hacía 22 años atrás y en medio de las innumerables movilizaciones populares que cuestionan las políticas del gobierno de ese país.
Días atrás, también fue llevada a cabo una huelga general en Chile por mejoras salariales donde las calles se llenaron de barricadas por trabajadores y estudiantes que acompañaron la movilización.
Las huelgas mineras en Sudáfrica, las cientos de huelgas en Italia, España, Bulgaria y el resto de Europa; la huelga general en Grecia de hace apenas 3 días y las permanentes luchas que se dan todos los días a lo largo y ancho del planeta, hostigan permanentemente los planes políticos y económicos de los monopolios en el mundo.
Frente al estado de putrefacción del capitalismo a nivel mundial, y a las irreversibles catástrofes económicas, sociales y ambientales producidas por la naturaleza misma del sistema capitalista, que sólo ofrece miseria y muertes a los pueblos del mundo, la clase obrera comienza a mostrar su impronta en la lucha.
Todos los días se producen hechos en el mundo protagonizados por la lucha de obreros de cientos de regiones en diferentes puntos del planeta. Millones de seres humanos, de diversas culturas, idiomas o religiones, etc., pero unidos bajo una misma clase, se movilizan diariamente en todo el mundo cuestionando la misma dominación capitalista.
La unidad de la clase obrera, no es una ilusión óptica, sino por el contrario tiene una base material objetiva, que es la unidad de los mismos intereses de clases y el mismo odio a lo más concentrado de la clase que los explota y los oprime: la oligarquía financiera mundial.

¿Qué se esconde detrás del nombramiento de Milani?

En primer lugar debemos reafirmar la idea de que las fuerzas armadas en el sistema capitalista son una institución del Estado capitalista, son parte de la defensa armada de los intereses del Estado que en ésta época le pertenece a los monopolios.
En la actual situación de la lucha de clases en donde la clase obrera comienza a irrumpir en sus luchas por conquistas económicas y políticas y se dispone como la gran mayoría de nuestro pueblo a presentar batalla contra todo tipo de injusticias aparece este escollo creando una nueva crisis política.
Este gobierno, que es de los monopolios, que gobierna para ellos, necesita “ordenar la tropa”.
Los monopolios necesitan producir, obtener ganancias extremas con la explotación de nuestra clase obrera y la opresión a todo el pueblo, pero en la vida real, la de todos los días, la ola de paros, de cortes de ruta, de protestas en los cuatro puntos cardinales del país les va creando una crisis de dominación y aquí comienza actuar otro aspecto clasista de la época histórica, intentar cada vez más con el engaño e intentar introducir el “garrote” a una población muy sensibilizada contra la institución represiva Madre que son las fuerzas armadas.
El nombramiento de Milani ha provocado el efecto contrario a lo querido por el gobierno de los monopolios, no han leído la realidad que se vive cotidianamente, la lucha de clases los lleva necesariamente al error y como no podía ser de otra forma este nombramiento que quiso disfrazar a la “mona de seda” provocó una oleada de protestas que no tendrá fin y que agrietó aún más las aguas de la clase dominante.
Este gobierno mostró su “as de espadas a todo el pueblo” y descubrió que tenía un cuatro de copas.
El debate y exigencia de los monopolios es encontrar respuestas políticas y militares a, por ejemplo, el corte de Panamericana por obreros autopartistas proveedores de automotrices, la joya del “modelo”. La crisis política en que están envueltos los aleja de encontrar respuestas políticas y militares y, por el contrario, siguen azuzando la indignación popular debilitándolos permanentemente. Milani nace como jefe del estado mayor extremadamente debilitado políticamente y condicionado en todo su accionar en la preparación represiva y en defensa de los intereses monopólicos. La movilización en su contra no cederá y se pondrá en caja todo intento de intervención “populista” de la institución represiva garantía del sistema capitalista.

Mario Roberto Santucho: “Poder Burgués, Poder Revolucionario”. Un aporte más a la revolución.

En estos breves párrafos se perfila  la idea revolucionaria que concebía nuestro Partido plasmado en un documento trascendental. En este  aniversario queremos homenajear a nuestro Secretario General y a todas las organizaciones colectivas del Partido que supieron sumar ideas-pensamientos-acciones en la elaboración de una estrategia revolucionaria.
Un extraordinario aporte teórico- político que significa para nosotros, hoy en día, un legado histórico.
Luego de varias décadas este planteo, en los hechos prácticos y más allá de cualquier verborragia revolucionaria fue literalmente defenestrado.  La esencia del documento apunta a la lucha por el poder, la construcción de un nuevo Estado obrero y popular con el concurso fundamental del pueblo movilizado y la preocupación constante de ir creando el poder local y con él la unidad de todo el pueblo.
He aquí algunos párrafos que nos invitan a profundizar todo el documento presente en nuestra página.
…A partir del Cordobazo y basándose en experiencias anteriores menores, nuestro pueblo tiende a insurreccionarse localmente, tiende a movilizarse aquí y allá, tomar sectores de ciudades y poblaciones, erigir barricadas y adueñarse momentáneamente de la situación rebasando las policías locales y provinciales.
Por eso podemos afirmar que en Argentina, en un período inicial, el doble poder ha de desarrollarse en forma desigual en distintos puntos del país, es decir que han de surgir localmente formas y órganos de poder obrero y popular, permanentes y transitorios, coexistiendo con el poder capitalista, enfrentándolo constantemente bajo el formidable impulso de la movilización de masas.
FORMAS DEL PODER LOCAL.
El problema práctico que nuestro pueblo debe resolver a partir de la nueva situación, es lograr paso a paso la acumulación de fuerzas necesarias para la lucha final por el poder estatal que debemos arrancar de manos de la burguesía.
Esa fundamental cuestión se resolverá en la situación revolucionaria que comenzamos a vivir, con el desarrollo del poder dual, tanto en su forma general de oponerse a ciertos planes del gobierno burgués e imponer las soluciones obreras y populares a determinadas situaciones en base a enérgicas movilizaciones de masas, llegando de esa manera a la constitución transitoria de órganos de poder a nivel general, como en su forma de poder local, manifestación principal del poder dual, en todo el próximo período, punto de partida sólido para una gigantesca acumulación de fuerzas revolucionarias. La lucha popular es desigual. Se desarrolla parcialmente, en un lugar de una manera, en otro de otra, en un lugar en un momento, en otro, en otro momento.
Necesitamos que todas esas luchas que se dan en distinto tiempo y lugar y con una fuerza y alcances diferentes, den siempre por resultado un aumento de la fuerza de todo el pueblo, que se vayan acumulando, hasta el momento que sea oportuno lanzar el ataque final, en todo el país y con todas las fuerzas disponibles….
Pongamos un ejemplo. En una fábrica grande se inicia una lucha reivindicativa o antiburocrática, que enseguida choca no sólo con la empresa y la burocracia sindical, sino también con la policía, con el Ministerio de Trabajo, en una palabra con el gobierno burgués y sus fuerzas represivas. El sindicato o comisión interna que dirige la lucha, moviliza a todos los trabajadores, gana un primer conflicto y amplía su fuerza. Si esa lucha se mantiene ahí, inevitablemente tenderá a debilitarse porque como es aislada, el enemigo puede combatirla pacientemente.
Después de un tiempo, en el curso del cual se dan nuevas movilizaciones, la "santa alianza" enemiga (empresa, burocracia, fuerzas represivas y gobierno), lanza su contraofensiva, y muchas veces, la vanguardia obrera, influida por el espontaneísmo, el populismo, el reformismo, o simplemente por falta de orientación política, es derrotada por no animarse a luchar, a veces, o por dar una batalla desesperada. En cambio actuando correctamente, en el caso quedamos como ejemplo hipotético, el sindicato o Comisión Interna clasista, al hacer conciencia de la situación revolucionaria que vivimos, comprenderá que el eje de sus esfuerzos debe dirigirse a acumular fuerzas….
Sobre la unidad
….No hay posibilidades de avanzar sólidamente en el desarrollo del poder local sin constantes avances en la unidad y movilización más amplia de las masas populares. Este es un problema crucial que será resuelto mediante una sabia combinación de avances en la movilización política de masas por abajo con una correcta política de acuerdos entre las distintas organizaciones obreras y populares.

Dos caras de la misma moneda

Contenta como perro con dos colas, volvía hace apenas unos días la ministra Débora Giorgi  de una gira que realizara por Asia, donde se reunió con ejecutivos de Toyota y Peve“Hemos avanzado en materia automotriz y también en el sector del litio”, declaraba entusiasmada la funcionaria,  que también estuvo reunida con los gigantes autopartistas monopólicos, como lo son Denso, Vutek, Yasaki, Bridgestone y JTekt Automotive.
Durante su visita a Japón, Giorgi, recibió anuncios de “inversión” de la automotriz Toyota para ampliar su planta de Zárate e “incrementar su productividad” en la Argentina; a lo que también se suma el acuerdo con Toyota Tshuso para avanzar en el proyecto de desarrollo industrial del litio “nacional”. En Zarate, los planes incluyen la ampliación en 10.000 metros cuadrados de la sección destinada a la fabricación de chasis, la expansión de la línea de pintura y la fabricación de 5.000 unidades adicionales de la pick-up Hilux.
Respecto al litio, el negocio abierto es gigantesco: el proyecto se puso en marcha a partir de la constitución de un megagrupo en el que también participan Orocobre (de origen australiano), Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado; con “inversiones” de 229 millones de dólares, la producción de carbonato de litio grado batería se iniciará a mediados de 2014. La producción estimada será de 17.500 toneladas por año contra las 2.000 actuales. Esto equivale aproximadamente al 10% de la capacidad de producción mundial actual.
Aquí están…estos son… los verdaderos negocios que el gobierno al servicio de los monopolios teje con los grandes monopolios, en desmedro de la calidad de vida y las condiciones de trabajo de millones de personas. En nuestro país y en el mundo.
Cualquier otra cosa que se diga es puro cartón pintado. Ejemplo de ello lo hemos tenido en el día de ayer, cuando en horas de la mañana, la Panamericana, a la altura de la ruta 197, en la localidad de General Pacheco, tuvo un corte realizado por trabajadores de la empresa de autopartes Kromberg & Schubert, que protestaban en reclamo de mejoras salariales y en contra de los despidos.
Esta empresa no es un “tallercito”. Kromberg & Schubert (Kroschu) es una autopartista de origen alemán que produce cableado eléctrico, mazos de cables para toda la instalación eléctrica de Volkswagen y Mercedes Benz en la Argentina, insumo de los denominados críticos para la fabricación de automóviles 0 km.
El conflicto originó que desde el viernes pasado la empresa no pudiese entregar nada de material.  Esta autopartista fabrica un producto que, como mínimo, es muy difícil de reemplazar, porque son diseñados especialmente para los vehículos y el medio en el que van a transitar.
El conflicto comenzó el pasado 10 de junio cuando los trabajadores bloquearon la entrada de la fábrica impidiendo el ingreso de camiones, luego del despido de 12 compañeros. La Delegación de Pilar del Ministerio de Trabajo dictó la Conciliación Obligatoria buscando enfriar el reclamo pero el 12 de junio los trabajadores redoblaron la apuesta y bloquearon además todos los accesos al Parque Industrial de Pilar. Los trabajadores fueron reincorporados, pero los volvió a despedir a causa de nuevos reclamos. Los trabajadores plantean que hasta que no sean reincorporados no desistirán de las medidas de fuerza.
Estas son las dos cara de una misma moneda, una política que se centra en promover los negocios de las grandes empresas, a costa de una mayor explotación y la destrucción de las condiciones de trabajo y de vida de los que generamos sus millonarias ganancias.

Conflicto en Liliana: “o hay trabajo para todos o no hay trabajo para nadie”

LILIANA es una empresa que fabrica electro doméstico como: estufas eléctricas, ventiladores, batidoras, minipimer, etc.
Esta marca reconocida por décadas cuenta con 3 plantas de producción en Rosario y alrededores una en zona sur (cordón industrial de Ovidio lagos), otra en zona norte y una nueva de lujo construida con millonarios subsidios del gobierno(o sea con nuestra plata) en granadero baigorria.
Los obreros de LILIANA sufren el  chantaje, el abuso permanente y las precarias condiciones de trabajo que frustran sus deseos  de futuro y de proyectar una vida mejor condenándolos a subsistir en la incertidumbre, como millones de trabajadores en nuestro país, mientras la empresa factura millones a costa de su esfuerzo.
Sobre un plantel aproximado de 500 obreros un 75% son contratados de varios años, con quincenas de $2200 a $2000 e incluso menos, hay compañeros con 20 años de servicio con las categorías más bajas, entre tantas otras cosas.
Artos de todo esto compañeros de la planta de zona sur, decididos impulsaron la organización por abajo y por fuera del gremio  (que es bien reconocido por los trabajadores como verdaderos policías de la patronal) al lado de la maquina como solemos decir juntándose con compañeros creciendo en confianza, planteando la lucha por cambiar esta situación.
Varios meses después, a mediados de abril los trabajadores de LILIANA entregan un petitorio en el ministerio de trabajo que por un lado denuncia a la empresa por  su sistemática violación a los derechos legales de sus obreros (cosa que el ministerio y el gremio ya saben y son cómplices, pero esta vez fueron abordados sorpresivamente por la voluntad masiva de los trabajadores)y por otro lado reclaman los siguientes puntos reivindicativos: pase a planta permanente a todos los trabajadores, categorías, elección de delegados y aumento de salario.
La empresa con la sangre en el ojo responde echando a 2 compañeros. Los trabajadores anticipando esto no solo organizaron el paro desde adentro sino que previa mente habían hablado y comprometido el apoyo a estudiantes, agrupaciones gremiales, organizaciones de derechos humanos, políticas, etc. Con la cual les plantaron protesta desde afuera y llamaron a los medios.
Se consigue reincorporar a uno de los despedidos y la empresa apretada por la situación generada por los trabajadores reunión mediante en la secretaria de trabajo accede a cumplir con al menos algo de lo planteado en el petitorio y empieza a efectivizar  trabajadores contratados. Los obreros vuelven a su trabajo sin abandonar sus reclamos, la movilización por abajo sigue.
La empresa va efectivizando grupos de compañeros por semana hasta fines de julio después se detiene. La empresa tenía un plan, sacarse de encima a 4 obreros  que son delegados de hecho de los compañeros (no reconocidos por el gremio) ensuciándolos para que el resto no salga en su defensa. Para esto montaron una escena del crimen que consistió en una tarima llena de cables y otros materiales de producción tirados dentro de un volquete fuera de planta tapados por otras tarimas puestas encima y esto fue fotografiado por personal de vigilancia a las 23:00 horas cuando no hay trabajadores en planta ya que su horario de salida es a las 15:00 horas. Con ese argumento y a pesar de que las cámaras puestas en el predio y en la zona no captaron nada, la empresa acusa y despide a estos 4 compañeros diciendo que no puede asegurar que fueron ellos pero la empresa no puede confiar en ellos. Una acción desesperada que da  muestra de su tremenda debilidad frente a los trabajadores.
A la salida de la jornada laboral se hace una asamblea donde se decide que los compañeros despedidos deben volver a trabajar.
Al día siguiente en el horario de ingreso a planta los trabajadores despedidos logran entrar a la fabrica por la fuerza de todos los compañeros, la patronal plantea que estos compañeros no pueden estar allí adentro por que ya están despedidos, a lo que contestan los obreros: o hay trabajo para todos o no hay trabajo para nadie y les plantan el paro.
La empresa se reúne con el gremio y este ultimo llama a una asamblea en fabrica el miércoles donde plantean que la empresa necesita que se devuelvan las horas del paro para seguir negociando  a lo que los trabajadores dicen no y rechazan rotundamente pero el gremio sigue insistiendo hasta que un compañero se les planta y los increpa diciéndoles  ¡¿ de qué lado están ustedes?¡¡ los sindicalistas de la UOM contestan con el silencio y finalmente se van .
Viernes se realiza la reunión en la secretaria de trabajo para la negociación y los trabajadores anuncian un corte de ruta en circunvalación y ruta 9 (autopista Rosario Buenos Aires) para meter presión por la reincorporación. Por su parte la empresa y el gremio firman la paz social, pero se reincorpora a los despedidos  con lo que los compañeros de LILIANA junto a agrupaciones y estudiantes festejan en el mismo lugar donde se iba a realizar el corte.
Este conflicto que aun no termina esta situado en un cordón industrial con historia reciente de lucha autoconvocada de obreros que supieron golpear fuerte a la política prepotente de los monopolios de redoblar la explotación  sobre los trabajadores  pauperizando los salarios y las condiciones de trabajo y con una clase obrera argentina dispuesta a la lucha, será nuestro camino buscar la unidad  que ensamble las fuerzas revolucionarias y de aspiraciones de cambio de todo un pueblo contra el enemigo burgués y sus ambiciones de mas explotación que nos obliga a vivir miserablemente mientras estamos rodeados de riquezas que emanan de nuestras manos.

Gobierno nacional: a favor de los monopolios y contra el pueblo

El “acuerdo” entre YPF-Chevron se formalizó ayer y, simultáneamente, pobladores de origen mapuche de la localidad neuquina de Añelo ocuparon cuatro pozos petroleros del área de Vaca Muerta.
La protesta no sólo denuncia el escandaloso contrato firmado bajo el pomposo paraguas de la “soberanía energética”, tan vergonzoso éste que cuenta con cláusulas secretas. Las que se conocen establecen la jurisdicción de la justicia de Nueva York para dirimir cualquier cuestión. Imaginemos entonces el contenido de las cláusulas secretas.
Pero además, los pobladores de origen mapuche, junto a organizaciones sociales, denuncian y luchan contra el propio sistema de explotación: La fractura hidráulica (fracking) de la roca donde se encuentra el petróleo y el gas a extraer es un sistema que está cuestionado, y hasta prohibido, en diversos países por altamente contaminante y porque utiliza impresionantes cantidades de agua, la que será utilizada en desmedro de las poblaciones aledañas a los yacimientos como ya se viene haciendo con las explotaciones convencionales pero ahora en cantidades multiplicada exponencialmente.
“La explotación de YPF está contaminando todo: la superficie, el agua, las napas”, aseguró Gabriel Cherqui, werken o mensajero de la Comunidad Mapuche Kaxipayiñ de Neuquén. “Se afecta a la Madre Tierra, contaminando y rompiendo el territorio de la comunidad, las pasturas de los animales, y el agua, que es lo único que tenemos nosotros”. La petrolera estatal respondió con un comunicado difundido esta tarde en el que se manifiesta “preocupada y sorprendida” ante lo que consideraron una reacción “desmedida de algunos grupos que parecieran querer boicotear la actividad”.
Y claro que se trata de un boicot. Lo que los pobladores neuquinos denuncian es algo de lo que pocos todavía se hacen eco, aunque ya ha ocurrido en otras provincias argentinas, que es la lucha contra el fracking.
Se trata de los negocios de los monopolios o de la vida de la gente, sin términos medios; así como se instaló la lucha contra el sistema de minería a cielo abierto a lo largo de nuestra cordillera, no nos equivocamos al afirmar que se abre un nuevo frente de lucha de nuestro pueblo contra esta nueva muestra de la explotación anárquica de nuestros recursos naturales.
Son ellos o somos nosotros, o se está con los monopolios o se está con nuestro pueblo; ninguna argumentación que invoque “soberanía” o “conveniencia para los intereses nacionales” puede confundir la experiencia del pueblo argentino por lo que la lucha será sin ningún tipo de concesión.